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El Presidente George W. Bush conversa con estudiantes de ciencias e ingeniería durante una visita al Yvonne A. Ewell Townview Magnet Center en Dallas, Texas, el viernes, 3 de febrero de 2006. Foto por Eric Draper de la Casa Blanca
No Child Left Behind Mejoras al Sistema Educativo de Estados Unidos Medida presidencial El 9 de enero de 2006, el cuarto aniversario de la aprobación de la Ley para que Ningún Niño Se Quede Atrás (No Child Left Behind o NCLB), el Presidente Bush viajó a North Glen Elementary en Glen Burnie, Maryland, para tratar el tema de los esfuerzos que se hacen para mejorar la educación. El Presidente Bush habló sobre el compromiso por su gobierno al sistema educativo de Estados Unidos, los logros alcanzados con NCLB y el trabajo que queda por hacer.
Con la aprobación de NCLB, el país hizo un compromiso nuevo a reformar la educación. Estados Unidos está combatiendo la intolerancia atenuada de las bajas expectativas al dejar de pasar a los niños por el sistema y desarrollar un sistema educativo que prepara a los niños para lo que requiere la economía mundial. El gobierno está elevando las expectativas e insistiendo en la responsabilidad por los resultados, otorgándoles a las autoridades locales más flexibilidad con los fondos federales, requiriendo currículos basados en métodos comprobados de enseñanza exitosa y dándoles opciones a los padres cuando las escuelas fracasan en su labor.
NCLB está elevando los estándares y asegurando que se evalúe el progreso educativo de más niños que nunca. La función del gobierno federal es insistir en los estándares, aportar recursos, hacer que se rindan cuentas y ayudar a los distritos escolares a cumplir con los estándares. Con la NCLB, las escuelas que reciben dinero del gobierno federal para la educación deben mostrar si los niños están aprendiendo y alcanzando las expectativas. Ya que los estados están evaluando a los estudiantes, sabemos que la NCLB está produciendo resultados con calificaciones más altas en las pruebas y una reducción de la disparidad en el rendimiento.
A pesar de los éxitos de NCLB, queda más trabajo por hacer. No Child Left Behind está surtiendo efecto, pero debemos continuar haciendo que las escuelas se responsabilicen por la enseñanza. Es necesario que el país mejore sus escuelas secundarias y evalúe a los estudiantes del noveno, décimo y undécimo grado. El Presidente ha propuesto programas para mejorar la educación que, por ejemplo, propician que más profesionales de los campos de las ciencias y las matemáticas trabajen como profesores adjuntos en la secundaria, y capacitan a más maestros para que dicten cursos avanzados. Con estas reformas, se mejorará la calidad de la educación y se garantizará que cada estudiante se gradúe de la escuela secundaria preparado para cursar estudios universitarios o incorporarse a la fuerza laboral con la capacitación necesaria para ser exitoso.
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