Para su publicación inmediata
Oficina del Secretario de Prensa
29 de diciembre de 2007
Discurso Radial del Presidente a la Nación
Buenos Días.
El Día del Año Nuevo ya se acerca y con él vendrán resoluciones para el Nuevo Año. Este fin de semana es un buen momento para dar gracias por nuestras bendiciones – y para resolver hacer mejor en el año venidero.
Una de nuestras mayores bendiciones como estadounidenses es que vivimos en un país con una economía creciente – donde las personas pueden perseguir sus sueños, convertir ideas en empresas, y mantener a sus familias. Es una medida de la resistencia de nuestra economía que aún con precios de petróleo elevados y una debilidad en el mercado de la vivienda, seguimos creciendo. En Noviembre nuestra economía había añadido empleos por 51 meses consecutivos –el período más largo de crecimiento de empleos sin interrupción jamás registrado. El desempleo está bajo en 4.7 por ciento. Las exportaciones han aumentado. Y lo básico de nuestra economía está fuerte.
Las estadísticas económicas son indicadores importantes. Sin embargo es más importante recordar que detrás de todos esos números están personas verdaderas. Estas personas incluyen los empresarios que viven sus sueños al comenzar nuevos negocios. Estas personas incluyen dueños de pequeños negocios que crean la mayoría de los nuevos empleos en nuestra economía. Más que nada, estas personas incluyen las decenas de millones de mamás y papás que trabajan y cuyos empleos mantienen a sus familias.
Yo sé que aún en esta economía creciente algunos de ustedes tienen verdaderas preocupaciones. Algunos de ustedes están preocupados por su capacidad de pagar por cobertura de salud para sus familias. A algunos de ustedes les preocupa cumplir con sus pagos hipotecarios mensuales. Algunos se preocupan por el impacto de costos de energía crecientes sobre el poder pagar combustible para sus vehículos y para calentar sus hogares. Ustedes esperan que sus líderes electos en Washington enfrenten estas presiones sobre nuestra economía – y les den a ustedes más opciones para ayudar a lidiar con ellas. Y yo he presentado varias propuestas para hacerlo.
En el último mes el Congreso ha respondido a algunas de mis iniciativas. Aprobaron un buen proyecto de ley energético… aprobaron un parche provisional para proteger a las familias de la clase media de la carga del Impuesto Mínimo Alternativo… y aprobaron una ley que ayudará a proteger a familias contra impuestos más elevados cuando sus prestamistas reduzcan su deuda hipotecaria. Pero esto sólo es un comienzo. El Congreso necesita aprobar legislación que ayude a hacer más asequible la cobertura de atención de salud para los pequeños negocios y trabajadores que compran sus propias pólizas. Y el Congreso necesita actuar más de prisa sobre el resto de mis propuestas para ayudar a familias que están luchando con pagos hipotecarios crecientes a quedarse con sus hogares.
Más que nada, necesitamos poner un buen ejemplo en Washington tomando cuidado con su dinero. Estoy decepcionado que los líderes en el Congreso me enviaron un proyecto de ley masivo para gastos que incluye unos 9,800 fondos designados. Los fondos designados son partidas de interés especial que son incluidas en grandes proyectos de ley de gastos como éste – muchas veces a última hora, sin discusión ni debate. Entre los fondos designados que el Congreso aprobó está uno para un museo de prisiones y otro para una escuela de vela. En la última elección, los líderes del Congreso hicieron campaña en base a una promesa de que reformarían los fondos designados. Han logrado un cierto progreso, pero lejos de lo suficiente. De modo que mi Administración está revisando opciones para tratar con gastos de fondos designados que son poco económicos.
Al enfocar los fondos designados también debemos restringir los gastos, mantener impuestos bajos y continuar sobre un camino hacia un presupuesto equilibrado. Y eso es lo que hará el presupuesto que yo someta en Febrero. Ustedes trabajan duro por su dinero, y para vivir dentro de sus posibilidades. Al mantener a sus familias, lo que menos necesitan son gastos poco económicos que conduzcan a un aumento en los impuestos. Y mi resolución para el Año Nuevo es esto: trabajar con el Congreso para mantener creciendo a nuestra economía… mantener baja su carga en impuestos…y asegurar que el dinero que usted envíe a Washington se gaste sabiamente – o no se gaste en absoluto.
Gracias por escuchar.